sábado, 26 de junio de 2010

Pequeños percances

Amandda's Story: #104
Unos días después, yo salí al Shopping con Lucrecia, y nos encontramos a Thomas que estaba con un grupo de amigos los cuales estaban fumando, lo cual no me agrado para nada (sin ofender a los que fuman, pero el cigarrillo es mi mas profundo enemigo). Nos hicimos las bobas y seguimos de largo, no quería que él pensara que lo estaba siguiendo o algo por el estilo, nosotras y él estabamos en el mismo lugar por pura casualidad. Al día siguiente nos vimos, y las cosas estaban muy cortadas nuevamente, estabamos bajo un techo esperando a que dejara de llover, y Thomas miraba constantemente un kiosco que estaba en la cuadra de enfrente. ”¿Qué sucede?” le pregunté algo extrañada. ”Nada.. solo quiero ir…a comprar unos caramelos o algo así…”. Su voz se noto muy extraña, como si no estuviese diciendo la verdad. Sabía que no era caramelos lo que querpia ir a comprar, pero hice como si no lo hubiese descubierto. Al rato me mira y me dice que el día anterior le dieron de probar cigarrillo, y que fumó como 5 o 6, que se le habpia vuelto un vicio y que no podía esperar a fumar nuevamente. Cuando escuché eso mi cara se congeló, y me puse realmente mal. Mi abuelo comenzó a fumar de muy joven, y terminio muriendo de cancer de pulmón, no quería el mismo destino para Thomas, agregando también que Thomas es asmático, lo que lo hace mas vulnerable a esta enfermedad. ”Thomas, si me amas enserio porfavor no vuelvas a fumar, hacelo por tu bien, hacelo por mi…”, “Amandda, no puedo prometerte nada, no quiero prometerte algo que quisas no cumpla, un vicio es un vicio, es difícil dejarlo ir…”. Simplemente me quede en silencio, un rato después cada uno se fue a su casa. Las cosas habían quedado muy mal.

Amandda's Story: #105

Al día siguiente decidimos encontrarnos en algún lugar, había cosas de las cuales quería hablar hace tiempo, porque pareciera que nunca era bueno el momento hasta que no habia otra opcion, hasta que no aguanté mas y supuse que ESE era el momento. Comenzamos a hablar respecto a las peleas que tuvimos, por qué nos peleamos, por cuánto tiempo, y de qué manera nos reconciliamos. Luego quise dejarle unas cosas en claro: comenzé a nombrarle todas aquellas cosas que extrañaba de él, habitos que solía tener los 1ros meses, y que al pasar el tiempo se fueron deteriorando. Peor tambien le mencioné cosas nuevas de él que me agradaban, aunque esas eran mas escasas. Él tambien me dijo las cosas que le molestaban, y prometimos que ibamos a poner lo mejor de nosotros para que todo esto valla mejor que la 1ra vez. Sólo esperaba a que esa charla sirviera para algo.

Amandda's Story: #106

14 de Febrero del 2008: Era un día muy caluroso, típico febrero en Argentina. La noche anterior me había quedado a dormir en la casa de Lucre, y a la tarde, Thomas nos pasó a buscar. Luego de alrededor de dos horas de viaje, llegamos a un Shopping que hacía mucho que queríamos conocer. El lugar era enorme, pero había algo que me deprimía bastante: Thomas ni siquiera se había acordado que era día de San Valentín. Yo veía a todas las parejas de la mano, muchachas con flores, osos de peluches y chocolates en las manos… Y Thomas ni me dijo “Feliz día”. Pero en fin, es una fecha como cualquier otra, pasarlo con él era el mejor regalo que podía recibir. Aunque lo que me puso un poco mal era que Thomas estaba un poco mas distanciado, a diferencia de los otros días después de aquella charla, en los que no se me quitaba de encima. Cuando volvimos, nos fuimos a un bar a jugar al pool. Yo estaba algo agitada, hacía muchisimo calor, y el calor me deprime bastante xD en eso Thomas se me acerca y me pregunta qué me pasaba, que estaba como triste, pero le dije que no me pasaba nada. En eso veo que abre su mochila y que de adentro saca una bolsa de regalo: ”¿Creíste que me iba a olvidar de este día?”. Mi cara de asombro fue increíble, no pude reaccionar, quede tan impresionada que me lo quedé mirando con el regalo sin abrir en la mano. ”Abrilo, espero que te guste”. Abro la bolsa, y me encuentro con un bellisimo oso de peluche color café con un perfume que hasta a las flores les encantaría. No supe que decir… no me esperaba ese regalo de su parte, y a la vez me senti taaan mal ¡Yo no le compre nada! Pero me dijo que mi amor era el regalo mas lidno que le pude dar. Simplemente lo abrazé y le di un dulce beso.

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